lunes, 28 de enero de 2008

Mil espejos

Y otra vez me hallo ante un nuevo proyecto que espero no olvidar mientras camino. Pues mis más profundos deseos prefieren no encontrar jamás la luz, y aún sí, los alumbro con una pequeña candela para que se reconozcan los unos a los otros.
Permíteme que te hable una vez más de aquello que crees perdido, sucumbido en el olvido.
Sólo te pediré un favor; cuando salgas de aquí mírame y ofréceme la mejor de tus sonrisas, sólo entonces podré descansar tranquila y confundirme entre espejos, para brindarte día a día las mil y una máscaras que el mundo me ha enseñado a tejer.

1 Comment:

Addictive Epicurean said...

Pero mira a quien tenemos por aquí...

Me alegro de que tu mundo se expanda hasta este otro rinconcito del multiverso. Es bonito ver cómo los hilos de araña de Madame Tarántula nos van conectando.

Gracias por la magia